jueves, 1 de agosto de 2013

Paradise

  Tal vez ya no haya oportunidad de volver a este lugar. El lugar donde naciste, crecimos y donde nos convertimos en lo que somos. Hasta hoy, esto es todo lo que conoces y tenemos. Tu ciudad, nuestro mundo, nuestro hogar. Toda nuestra historia, esa que supimos escribir día a día y que hemos vuelto mas interesantes con el correr del tiempo; escríbela en tu corazón. Conserva en tu memoria esas miles de aventuras que nos unieron para recordarlas el día que las necesitemos. No te olvides de esas viejas construcciones que supieron refugiarnos en las noches de frió y  días lluviosos. Canta las canciones que nos acompañaron y nos identifican recreando momentos y volviéndolos infinitos. Trae contigo las fotografías de nuestros amigos que hoy nos despiden con cabezas gachas y lagrimas en los ojos,  haz que sepan que pronto nos volveremos a encontrar.
  Echa un vistazo por ultima vez, seca las lagrimas de tus ojos y respira profundo.  Se que extrañaras todo esto al principio, es algo normal que debes afrontar. Algún día intentaras recordarlo ¿Que era lo que sentíamos cuando estábamos allí? ¿que era lo que nos mantenía vivos y esperanzados en un lugar así? pero ya no importara la respuesta, ya no habrá necesidad de mirar hacia atrás. Abrígate, toma tu equipaje y ve a despedir a cada uno de ellos. !Vamos! El viaje esta por comenzar..
 Al mirar hacia atrás la niebla habrá ganado lugar, cubrirá el camino por el cual veníamos. Recuerda: no hay razón para que temas, aun estaré a tu lado tal como lo he prometido. Se que sientes un poco de miedo y aun no sabes con que te puedes a encontrar mas adelante pero no dudes de mí y de los planes que tengo para ti. Ese mundo que era seguro para ti, los caminos que conocías y esos lugares confiables que has sabido memorizar ya no estarán, son solo parte de un pasado que ya no necesitas. Aprecia el paisaje, disfruta el camino. Deja tu reloj y nunca pierdas la esperanza aunque nos tardemos en llegar. Toma mi mano, no mires atrás, ya no lamentes las cosas que has tenido que dejar. Prométeme que confiaras en mi pase lo que pase y aunque no me veas, no me sientas y no me escuches aun estaré ahí; cierra tus ojos y háblame.
  Huellas. Huellas en la nieve se desvanecerán una a una con cada paso que demos para avanzar pero ya no harán falta cuando conozcas el lugar donde te quiero llevar.



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